La industria textil de Mar del Plata ya perdió 300 empleos y alerta por una crisis que se agrava
Actualidad Miércoles 26 de Noviembre de 2025
El sector textil marplatense atraviesa una de sus peores etapas en años. Según la Cámara Textil local, cerca de 300 trabajadores quedaron sin empleo en lo que va de 2025, lo que equivale a entre el 15% y el 20% de la plantilla total del rubro en la ciudad. A la par, las ventas registran una caída del 50% frente al año pasado, un derrumbe que pone en riesgo la continuidad de numerosas fábricas.
Un “combo explosivo” para la producción local
El presidente de la entidad, Guillermo Fasano, sostuvo que el deterioro responde a una combinación de factores que golpean de lleno a la industria: la apertura importadora, el avance de las plataformas digitales de venta de ropa y tasas de interés que desalientan el consumo.
A esto se suman, según señaló, los problemas financieros de varias empresas marplatenses, algunas ya en concurso de acreedores. La situación podría derivar en nuevos despidos si no se produce un cambio en el escenario económico.
Caída del consumo, atraso cambiario y déficit comercial
Fasano advirtió que la crisis no se explica solo por la retracción del mercado interno. Denunció además un “atraso cambiario” que encarece la producción nacional y deja a la industria local en desventaja frente a la competencia extranjera.
El fenómeno se agrava con la creciente salida de divisas por compras de indumentaria en el exterior, lo que profundiza el déficit comercial del sector.
El reclamo empresario: protección, financiamiento y alivio fiscal
Ante este panorama, la Cámara Textil de Mar del Plata reclama medidas urgentes para evitar nuevos cierres. Entre sus pedidos figuran herramientas que frenen la competencia desleal de las importaciones, líneas de crédito con tasas acordes a la realidad productiva y un esquema impositivo que permita a las pymes sostenerse y competir.
Fasano fue categórico: si no se adoptan políticas que apunten a equilibrar el mercado y dar oxígeno financiero al sector, la crisis podría intensificarse y dejar un saldo aún mayor de despidos y fábricas paralizadas.













