Científicos en emergencia: los salarios del sector volvieron a caer y ya acumulan un desplome de hasta el 50%
Política gremial Martes 16 de Diciembre de 2025
El último dato de inflación publicado por el INDEC trajo consigo una nueva mala noticia para el sistema científico argentino. Aunque el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de mayo marcó un incremento de apenas el 1,5%, el más bajo en cinco años, los salarios de investigadores, docentes universitarios y personal científico volvieron a perder poder adquisitivo debido a la ausencia de actualizaciones salariales por parte del Gobierno.
De acuerdo con un análisis del Grupo Economía, Política y Ciencia del Centro Iberoamericano de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación (CIICTI), la situación salarial en el sector científico-tecnológico es crítica. Los docentes e investigadores de las universidades nacionales sufrieron una nueva baja real del 1,5% solo en mayo, acumulando una pérdida del 29% desde noviembre de 2023. En algunos casos, como el del CONICET, la caída supera el 34%.
Deterioro sin freno
Los investigadores y becarios del CONICET, principal organismo de ciencia del país, recibieron un aumento del 1,3% en mayo, es decir, también por debajo de la inflación. Desde noviembre del año pasado, sus ingresos han retrocedido un 34,8% en términos reales. En paralelo, los científicos que trabajan bajo el régimen del Sistema Nacional de Empleo Público enfrentan un panorama similar, con una pérdida del 25,7% en igual período.
Este deterioro salarial se da en un contexto más amplio de ajuste al sistema de ciencia y tecnología. Entre las medidas más significativas están el cierre de programas de investigación, la suspensión del ingreso a la Carrera del Investigador Científico del CONICET, despidos de personal calificado en organismos como el INTI, el INTA y el Banco Nacional de Datos Genéticos, y la cancelación de financiamiento internacional ya aprobado por el BID.
Un retroceso histórico en inversión pública
Uno de los datos más alarmantes es el desplome de la inversión estatal en el sector, que actualmente representa apenas el 0,2% del PBI, el nivel más bajo de las últimas décadas. Esto implica no solo el incumplimiento de la Ley de Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia, sino también un retroceso estructural que pone en riesgo décadas de desarrollo científico.
Fuga de talentos y perspectivas sombrías
La crisis también comienza a generar consecuencias estructurales: muchos científicos, sobre todo jóvenes, evalúan emigrar al exterior o abandonar la investigación por falta de condiciones mínimas de trabajo. El llamado "éxodo científico" vuelve a ser una amenaza latente, en un país históricamente golpeado por crisis cíclicas pero que había logrado recomponer su sistema de ciencia en los últimos años.
En este contexto, la comunidad científica reclama una recomposición urgente de salarios, la reapertura de convocatorias y el restablecimiento del financiamiento nacional e internacional, como condiciones básicas para evitar un colapso aún mayor del sistema. Mientras tanto, la incertidumbre domina el presente de miles de trabajadores de la ciencia en Argentina.














