La crisis de Galeno ART llegó a un punto límite y la aseguradora se encamina hacia un proceso de liquidación forzosa, luego de no presentar el plan de regularización solicitado por la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN). La medida abre un escenario de extrema incertidumbre para más de 400 trabajadores, que podrían perder sus puestos en las próximas semanas.

La SSN había intimado a la compañía a presentar un esquema anticrisis que permitiera estabilizar su operatoria y garantizar su solvencia. Al no cumplirse ese requisito, el organismo aceleró los pasos administrativos y dejó a la firma a las puertas de un procedimiento similar a la quiebra. Según fuentes oficiales, la resolución se publicará en los próximos días en el Boletín Oficial, lo que habilitará la inhibición de operaciones y el pase del expediente al fuero comercial. La sentencia que emita ese tribunal determinará el cese definitivo de actividades y, con él, la extinción formal de los contratos laborales.

Un conflicto que impacta en todo el grupo y que prueba el liderazgo sindical

La crisis de la ART se suma a los ajustes y recortes que ya afectan a otras empresas del Grupo Galeno, un conglomerado que en los últimos meses evidenció señales de vaciamiento: cierre de servicios, retiros voluntarios, reubicaciones internas y denuncias por prácticas que los trabajadores definen como “precarización encubierta”, especialmente en áreas sensibles como auditoría y atención directa.

En medio de este escenario emerge un desafío político-sindical de alto voltaje: el primer test sectorial para Jorge Sola, recientemente convertido en uno de los principales referentes de la CGT. Su rol frente a esta crisis podría marcar el ritmo y el estilo de su conducción en un contexto donde numerosas empresas afrontan situaciones críticas y reclaman intervención de la central obrera.

Hasta el momento, entre los empleados predomina la preocupación y también cierto malestar con la conducción sindical, aunque mantienen reserva a la espera de una definición que les dé alguna perspectiva de continuidad o contención.

Despidos inminentes y un esquema de indemnización que genera dudas

Con la liquidación forzosa, más de 400 personas quedarán sin trabajo. Algunos empleados ya fueron notificados de su desvinculación anticipada a mediados de diciembre, mientras que para el resto la sentencia comercial marcará el final del vínculo laboral.

A esto se suma otra inquietud: el esquema de indemnización. Según trascendidos, los pagos no serían afrontados directamente por la empresa, sino por el Fondo de Indemnización de Entidades en Liquidación (Fidec), que cubriría el monto total, pero dividido en dos cuotas. La primera llegaría aproximadamente a los tres meses y la segunda cerca de seis meses después. La modalidad, en pleno contexto económico adverso, alimenta la incertidumbre de cientos de familias que dependen de esos ingresos para sostenerse.

La situación de Galeno ART expone uno de los capítulos más delicados de la crisis del sector asegurador y abre un interrogante mayor sobre la capacidad de respuesta estatal, empresarial y sindical frente a procesos que combinan insolvencia, conflictividad laboral y un fuerte impacto social.