En medio de un panorama económico nacional complejo, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, firmó este lunes un nuevo incremento salarial del 5% para trabajadores estatales provinciales, municipales y comunales. Con esta medida, el salario mínimo en el sector alcanza los $780.000, marcando la séptima recomposición salarial en menos de dos años de gestión.

El acuerdo fue sellado con representantes de los principales gremios de la provincia: UPCN, ATE, el Frente de Gremios Estatales (FGE) y la Unión de Gremios Estatales (UGE). Durante la conferencia de prensa posterior a la firma, Jaldo resaltó que “el objetivo es mantener el poder adquisitivo en un contexto nacional desafiante”, y destacó que esta mejora fue posible gracias a una “gestión presupuestaria responsable”.

“Con un gran esfuerzo, la provincia puede vivir hoy este tipo de instancias”, expresó el mandatario tucumano.

Además, adelantó que en los próximos días continuarán las reuniones con otros gremios provinciales con los que ya hay consenso y que se espera cerrar formalmente los acuerdos antes del fin de la semana. “Hemos comenzado con esta paritaria y en los próximos días estaremos finalizando con el resto”, anticipó.

Por su parte, el ministro de Gobierno y Justicia, Regino Amado, celebró la firma del acuerdo y remarcó que se trata de una acción política que contrasta con el panorama nacional, donde más de 50 mil trabajadores estatales fueron despedidos. “En Tucumán no solo conservamos los puestos de trabajo, sino que también garantizamos estabilidad laboral y recomposición salarial, que son demandas clave de los sindicatos”, enfatizó el funcionario.

Jaldo también contextualizó la negociación dentro del modelo económico nacional impulsado por el presidente Javier Milei, centrado en el ajuste fiscal y la meta de déficit cero. “En ese escenario estamos parados, y aun así hablamos de aumentos salariales para quienes sostienen el funcionamiento del Estado”, concluyó.