La última Encuesta de Perspectivas de la Unión Industrial Argentina (UIA) presenta datos preocupantes que reflejan la aguda crisis que afecta al sector industrial. Según el informe, seis de cada diez empresas que previamente esperaban una mejora económica en el país ahora perciben una situación más adversa que hace un año. La recesión sigue su curso, golpeando especialmente a las pequeñas y medianas empresas (pymes), que enfrentan las mayores dificultades.

El Monitor de Desempeño Industrial (MDI), un índice clave que adelanta el ciclo de actividad, muestra una caída persistente con una lectura de 44,3 en junio, por debajo del umbral de 50 que indica contracción. Este es el noveno mes consecutivo con un índice inferior a 50, aunque ha mejorado levemente en comparación con el inicio del año. El MDI refleja el desempeño en producción, ventas, empleo, tiempos de entrega y niveles de stock.

El informe destaca que el 38,9% de las empresas reportó disminuciones en la producción, mientras que el 43,7% enfrentó caídas en las ventas. En el ámbito de las exportaciones, el 28,2% de las empresas reportó reducciones, y el 17,3% tuvo que reducir su plantilla laboral. Estos porcentajes son levemente inferiores a los del relevamiento anterior, aunque siguen indicando una tendencia preocupante.

De los doce sectores industriales analizados, diez tuvieron un MDI inferior a 50, aunque dos sectores, Minerales no metálicos y Otras industrias, superaron esta barrera. Los sectores más golpeados incluyen Confecciones, cuero y calzado, y Edición e impresión.

El uso de capacidad instalada se situó en un promedio de 58%, con el 69% de las empresas operando por debajo de niveles óptimos. La UIA informó que el 55,7% de las empresas no espera recuperar la capacidad instalada hasta la segunda mitad de 2025 o más tarde. Entre las principales preocupaciones están la caída de la demanda y el aumento de costos, especialmente los laborales y energéticos.

En términos de producción y ventas, la situación es alarmante. El 38,9% de las industrias reportó caídas en la producción y el 43,7% en ventas al mercado interno. Aunque las exportaciones mostraron una caída menor (28,2%), la tendencia general es de declive.

El empleo también se ha visto afectado, con más empresas reduciendo personal que contratando. La reducción de turnos también es una medida frecuente. Las pymes, en particular, están en una situación crítica, con el 39,2% de las empresas pequeñas y medianas reportando caídas en la producción y ventas.

A pesar del pesimismo actual, los empresarios mantienen cierta esperanza para el futuro. Aunque el 60,6% de las empresas ven una situación económica nacional peor de lo esperado para 2024, y el 69,4% percibe un deterioro en su sector, el 62,9% espera una mejora en su situación empresarial para el próximo año. Esta expectativa de recuperación, aunque optimista, contrasta con la realidad económica actual y subraya la incertidumbre que enfrentan las empresas en Argentina.