Diana Lara Moriñigo dialogó con RADIO REALPOLITIK FM (www.realpolitik.fm) y brindó un conmovedor y contundente testimonio en el marco de su derecho a réplica, luego de que su madre, Graciela Luján Riccio, acusara públicamente a un vecino y al padre de sus hijos de estar vinculados al incendio en el que murió su hijo César, un adolescente con discapacidad.

“Mi mamá tiró mierda para todos lados, no dijo una sola verdad”, sostuvo Diana, quien decidió salir al aire para desmentir de manera categórica lo expresado por Riccio.

Una historia atravesada por conflictos familiares

Diana explicó que desde hace años mantiene un profundo distanciamiento con su madre y que actualmente vive en el Partido de La Costa junto a su padre y dos de sus hermanas. Aseguró que tanto ella como las menores deben mantenerse en constante alerta para evitar cualquier tipo de acercamiento por parte de Riccio.

“A donde voy tengo que tener cuidado. Mis hermanas tienen miedo de que mi mamá aparezca. Y en Gorina pasaba exactamente lo mismo”, relató.

Según su testimonio, la ruptura familiar se remonta a su infancia. Recordó que Riccio abandonó el hogar “en Nochebuena”, cuando ella tenía 7 años, dejando a todos sus hijos al cuidado de su padre. “Fue un golpe durísimo. Tuve que ir once años al psicólogo”, afirmó.

El incendio que terminó con la vida de César

Uno de los momentos más fuertes de la entrevista fue cuando Diana relató lo que ocurrió la noche del incendio en el que falleció su hermano César, de 15 años.

Contó que ella tenía 12 años y que ambos dormían en una casilla de madera ubicada detrás de la vivienda principal. “Me desperté sintiendo olor a humo. Cuando abrí la puerta de la pieza de César, la cucheta estaba envuelta en llamas”, narró entre lágrimas.

Afirmó que no pudo ingresar a la habitación debido a que el fuego bloqueaba el acceso y recordó los desesperados gritos de su hermano: “Me gritaba ‘Lara, Lara’, pero no pude entrar. Nunca lo voy a superar”.

La joven también puso en duda la versión de un cortocircuito. Aseguró que los bomberos inicialmente sugirieron esa hipótesis, pero que su padre, tras observar el estado del cableado, detectó que el cable estaba “cortado con tijera” y no quemado. “Era imposible que haya sido un cortocircuito”, sentenció.

“Para mí fue un ajuste de cuentas”

Diana fue contundente al explicar qué cree que desencadenó el incendio:
“Para mí fue un ajuste de cuentas. Mi mamá tenía problemas con todo el mundo. Incontables quilombos por todos lados”.

Relató numerosos episodios violentos protagonizados por su madre, incluso uno que terminó con una denuncia por una agresión con machete, hecho que —según aseguró— aparece fácilmente en los buscadores.

También recordó que durante el régimen de visitas Riccio arrojaba cascotes hacia el patio donde jugaban los menores: “A mi hermano César casi le parte la cabeza”.

Un vínculo roto y nuevas denuncias

Consultada sobre la reacción de su padre a la aparición mediática de Riccio, Diana sostuvo que “ya no le interesa nada que tenga que ver con ella” y denunció que la mujer está “usurpando” una vivienda que pertenece legalmente a su progenitor.

“Él no la quiere ni ver. Le hizo perder mucha plata y está ocupando una casa que es de mi papá”, afirmó.

“Yo cuento lo que vi”

Diana insistió en que habla basándose exclusivamente en lo que vivió y en lo que presenció desde niña:

“No digo nada porque me llenen la cabeza. Yo cuento lo que vi. Nadie sabe lo que pasé desde los 7 años”.

Con profunda emoción, aseguró que nunca superará la muerte de su hermano y que su única intención al salir al aire fue “que se escuchen las dos campanas” frente a las declaraciones públicas de su madre.