
Aguiar contra Lugones: “Es un mercader de la salud” y exige su renuncia en una masiva protesta nacional
Política gremial Sábado 19 de Julio de 2025
La Marcha Nacional por la Salud Pública tuvo su epicentro en la Ciudad de Buenos Aires, con una masiva movilización encabezada por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) desde el Hospital Garrahan hasta la Plaza de Mayo, y se replicó en múltiples ciudades del país. En un tono encendido, el secretario general de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, denunció el ajuste sanitario del Gobierno y exigió la renuncia inmediata del ministro de Salud, Mario Lugones.
“Lugones es un mercader de la salud. Está desmantelando a propósito el sistema público para beneficiar a las corporaciones médicas privadas. Serán responsables por cada muerte que ocurra en esta crisis que ellos mismos provocan”, disparó Aguiar ante una multitud.
La protesta, organizada en conjunto con el Frente por la Soberanía, el Trabajo Justo y el Salario Digno —espacio que nuclea más de 100 sindicatos—, también denunció el vaciamiento de hospitales nacionales, la precarización de médicos residentes y la falta de estabilidad para los trabajadores contratados. El extenso recorrido incluyó una parada frente al Congreso de la Nación, antes de culminar frente a la Casa Rosada.
Entre los principales reclamos se exigió:
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Salario mínimo equivalente al costo de la canasta familiar, estimada por trabajadores de ATE-INDEC en $1.869.924.
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Pase a planta permanente de todos los contratados del sistema de salud.
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Reconocimiento pleno de derechos para médicos residentes.
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Condiciones edilicias y laborales dignas en todos los hospitales nacionales.
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Rechazo al desfinanciamiento del Garrahan y de otros centros sanitarios clave.
“Nuestros reclamos no son irracionales. Queremos salarios que alcancen, estabilidad, y el fin de la precarización disfrazada de libertad”, remarcó Aguiar, quien anticipó que ATE profundizará el plan de lucha y volverá a marchar el próximo 7 de agosto, Día de San Cayetano, junto a movimientos sociales y sectores populares bajo la consigna de “Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo”.
La protesta nacional marca un nuevo capítulo de conflictividad sindical, en el marco de un ajuste que golpea con dureza al sistema sanitario público, poniendo en riesgo su funcionamiento básico.