La Confederación General del Trabajo (CGT) cerró el año con una reunión política y sindical de alto voltaje junto al gobernador bonaerense Axel Kicillof, en la que analizó el impacto del ajuste económico nacional y volvió a manifestar un fuerte rechazo a la reforma laboral que impulsa el Gobierno. Desde la central obrera alertaron por la destrucción de empleo, la caída de la industria y el deterioro del poder adquisitivo, y ratificaron que darán pelea en todos los frentes para defender los derechos laborales.

El encuentro se llevó a cabo este jueves y contó con la participación de la cúpula cegetista, funcionarios del gabinete provincial y autoridades bonaerenses. Allí, los dirigentes sindicales coincidieron en que el actual modelo económico “golpea de lleno al empleo y a la producción nacional”, profundizando la recesión y debilitando el mercado interno.

Uno de los ejes centrales de la reunión fue la preocupación por una eventual reforma laboral, que desde la CGT calificaron como “regresiva, flexibilizadora y precarizadora”. Según advirtieron, la iniciativa no sólo pone en riesgo conquistas históricas del movimiento obrero, sino que tampoco ofrece respuestas reales a la crisis económica y social que atraviesa el país.

En ese marco, la central obrera subrayó el impacto del ajuste sobre la industria nacional y el entramado productivo, con especial énfasis en los sectores manufactureros. “La caída de la actividad se traduce en despidos, suspensiones y pérdida de derechos”, señalaron, al tiempo que reclamaron políticas activas para sostener el empleo y la producción.

Los referentes sindicales destacaron, además, el rol del Gobierno de la provincia de Buenos Aires en la defensa del trabajo y la industria, y valoraron las medidas provinciales orientadas a amortiguar los efectos del ajuste nacional. También resaltaron la figura política de Axel Kicillof en el escenario federal y la necesidad de articular estrategias conjuntas entre sindicatos y gobernadores para enfrentar las políticas del Ejecutivo nacional.

Del encuentro participaron la vicegobernadora Verónica Magario; el ministro de Trabajo bonaerense, Walter Correa; la jefa de Asesores del Gobernador, Cristina Álvarez Rodríguez; el ministro de Gobierno, Carlos Bianco; y el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque.

Al cierre, la CGT ratificó su compromiso con la defensa de los derechos de las trabajadoras y los trabajadores y anticipó que utilizará “todas las herramientas democráticas disponibles” para frenar la reforma laboral. Movilización en las calles, debate parlamentario y acciones judiciales forman parte del abanico de medidas que la central obrera aseguró estar dispuesta a impulsar para “defender el trabajo argentino y la producción nacional”.