La Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) se sumó a la movilización convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) en Plaza de Mayo para rechazar la reforma laboral impulsada por el gobierno de Javier Milei y alertó sobre el impacto que la iniciativa tendría no solo en el mundo del trabajo, sino también en el sistema educativo. “Está en juego la educación, el trabajo y el futuro”, advirtió Ariel Guede, secretario general bonaerense del gremio.

Desde AMET señalaron que el proyecto oficial implica un ajuste directo sobre las y los trabajadores y que sus consecuencias se sentirán con fuerza en el salario, la jornada laboral y las condiciones de empleo. “Vas a trabajar más y a ganar menos; el ajuste va a ser en tu salario y en tus vacaciones”, expresaron desde la organización sindical.

El gremio también vinculó la reforma laboral con el proceso de desfinanciamiento de la educación pública y, en particular, de la educación técnica y profesional. “El ajuste es que el Estado abandone las escuelas, desfinanciando la educación pública y la educación técnica profesional”, advirtieron, y remarcaron que las políticas del Gobierno afectan de manera integral a los sectores educativos y laborales.

En ese marco, AMET recordó que viene denunciando desde hace meses el recorte presupuestario en el área educativa y puso el foco en el proyecto de Presupuesto 2026. En noviembre, el sindicato cuestionó la derogación del artículo específico de financiamiento, al considerar que “representa un ataque directo a la educación técnica, agraria y de formación profesional”.

Aquella crítica se produjo durante la presentación del Presupuesto 2026, que continúa generando fuertes rechazos en distintos sectores. “La educación, como ocurre con otras áreas sensibles, ve cortado su presupuesto y los actores del mundo educativo lo vuelven a entender como un ataque directo del Gobierno libertario de Javier Milei”, había señalado entonces el gremio.

Ahora, AMET ratificó su rechazo a la reforma laboral y reafirmó su compromiso con la defensa del trabajo y de la educación pública, al considerar que las medidas en discusión comprometen seriamente el futuro de las próximas generaciones.